Testimonios – Sonoterapia
HOLA Roman…Soy Paco … Cada dia estoy mas convencido de que cada uno tiene un camino de aprendizaje en la vida y que venimos con un propósito para el cual otro seres te ayudan, te aportan, te reconfortan, te enseñan, te dan amor. Sé que este encuentro, en este Curso de Terapia de Sonido que ha sido con todos vosotros tenia que ocurrir porque debíais estar a mi lado para sanar esa parte emocional que muchos sabéis. Tus cantos son portentosos, mágicos, divinos, sanadores … no solo has conseguido aportar esa luz con tus enseñanzas a mi alma sino a mi cuerpo físico, sanando mi tocada rodilla… mil gracias por lo que has conseguido extraer de nosotros, por conseguir guiarnos en el camino de los armónicos y su poder sanador de esa forma tan sutil y delicada. Namaste
Paco Jimenez MateoUn pedacito de cielo
La primera vez que llegué a Diafanum me enamoré del lugar y de los seres maravillosos que lo atienden. Amor es lo primero que sientes al llegar. Dulzura, cuidado, luz…Un pedacito de cielo en la Tierra lleno de energía, de prana, de seres luminosos. Un refugio en el que sanar y conectar con tu alma y tu luz. Un sitio donde ser una misma y crecer satisfecha, contenta y agradecida a la vida, recuperando las fuerzas para vivir. Cuando entras por sus puertas tu cuerpo y tu mente se relajan. Sueltan la tensión. Aquí no hay que protegerse… tan solo abrirse y agradecer al bosque y sus seres el cuidado y el mimo. La belleza te rodea y no puedes evitar sonreír desde el corazón al escuchar los mensajes que los seres del bosque te regalan.
Llevo unos años con un proceso muy complicado y Diafanum me rescata de la angustia, me saca del pozo, me llena de energía para seguir, para sanar, para encontrar el camino de recuperación. Subo a la montaña con Román, Mamen y Andrés, con el espíritu de la montaña, del bosque, ¡Pachamama me habla y me llena de esperanza! En el bosque me relajo, la cabeza sobrecargada se observa y suelta, deja de enredarse en los miles de pensamientos, el cuerpo se queja… suenan los Gongs y todo cambia. Algo se limpia, se despega de mi aura, de mí ser, me siento ligera, puedo RESPIRAR. Cada célula de mi cuerpo responde a los Gongs, vibran llenas de vida con ganas de sanar y dejar atrás el último reto. Imágenes preciosas, símbolos que se meten en mi útero y giran regenerándolo, pulsando la vida desde las profundidades de mi ser, limpiando mis órganos, suelto, me abro y el sonido limpia y ordena, la energía se expande, el dolor desaparece… Viajo por el universo sintiéndome libre y llena de amor. Secretos familiares se desvelan, conciencia y conexión. Me siento en unión con los cielos, libero, suelto,…lloro de gratitud: hay esperanza!
Gratitud máxima a la vida por haberme traído a este oasis de paz y a sus habitantes por cuidarme con tanto AMOR. Gracias por cada sesión de sonido, cada una distinta. Capa a capa se van deshaciendo los bloqueos, se derriten las corazas de protección que me impiden llegar a mí. Las sensaciones corporales son increíbles ¡Vibra la vida y se ordena! No hay nada que hacer, tan solo estar, ser, rendirte al infinito. Permitir, soltar completamente el control para que dé comienzo al viaje. Un viaje al centro mismo de la existencia. El éter se abre, se expande y te da la sensación de que todo es posible. Hay espacio para que la vida se desarrolle ¡Gratitud infinita Roman!
Maria SaranjeetHola Román…el martes tuve una experiencia de sanación con los cantos armónicos… un amigo me llamó (siempre que tiene una lesión me llama) para verle el codo que tenia fastidiado, no podía ni vestirse. Somos compañeros de osteopatía pero yo no la ejerzo como tal. Pues después de intentar con mucho esfuerzo movilizar esa cabeza del radio que parecía que le tenia pegada con superglue, me di por vencido y le propuse cantarle armónicos… Después de cantarle durante diez minutos y utilizar el laser en articulaciones de codo y muñeca, me dijo que sintió mucho calor en el brazo… Ayer fui a verle, por si tenia molestias y me dijo que me fuera para casa que estaba perfecto… yo estoy seguro que fueron los armónicos pues con la osteopatía, con lo durísimo que tenia el brazo y la articulación no tuve la sensación de movilizarla. Fue una gran sensación…. Solo quería que lo supieras… GRACIAS…NAMASTE
AnónimoTener la oportunidad de estar y trabajar en este espacio tan cuidado que es Diafanum, donde la magia de ver florecer los corazones está a la orden del día, es una verdadera suerte.
Transitamos tiempos en los que es especialmente valioso poder estar en lugares y compañías que nos permiten ser y sanar lo que necesitamos. Diafanum es este lugar, que de la mano de Roman, nos acompaña en procesos de transformación a través del contacto con la Tierra tan cuidada aquí, liberando las memorias que nuestro cuerpo atesora y sacando nuestra voz para descubrirnos y comenzar a Ser aquellos que en un principio fuimos.
El agradecimiento fue, es y será total a Roman por haber creado este lugar y sostenerlo con tanta entrega y tanto amor, a todos los que le acompañan, guían y apoyan en esta encrucijada.
Eva de las Heras Arribas, participante en tantas cosas en este maravilloso templo transparente que sólo puedo decir que hoy soy lo que soy en buena parte gracias a Diafanum, su guardián y sus gentes Gracias
Eva de las HerasGrupito,
gracias por vuestras palabras y presencia.
Desde mi punto de visto de vista, el taller resultó un éxito claro.
El ejercicio propio (por el momento) no se da cómo o cuándo me gustaría (aunque creo-espero- que el tiempo querrá otorgarme un poquito más de dedicación antes del próximo taller).
Mis sensaciones, sencillamente, son de alegría y sonrisa.
También con ganas de reencuentro.
Desde un sincero Agradecimiento por este compartir, os deseo una Buena práctica, gente linda.
Un abrazo grande
VirginiaHola a todos.
Para mí también ha sido un fin de semana muy especial, quiero a agradeceros Román, Rafa, Corina y a todos los compañeros lo que he experimentado, he alucinado con los cantos armónicos, ¿de dónde salía ese sonido cuando estábamos todos cantando y se llenaba la habitación con un único sonido que envolvía todo?, miraba a Román, a Rafael y en ese momento estaban respirando, pero sin embargo el sonido estaba ahí y fusionaba todas nuestra voces en un sólo armónico, es impresionante la fuerza que tienen.
Por otro lado, los cuencos que con sus voces nos envolvían en un estallido de sonido acogedor y cálido, como un abrazo.
Estoy encantada e ilusionada y doy gracias a Dios por haberme llevado hasta este curso, para mí es un principio que me está llevando hacia el reencuentro con lo mejor y más profundo de mí misma.
Estoy aprendiendo a conectar con mi cuenco y gravo mi voz cuando puedo para después escuchar mis armónicos asomando tímidos.
Gracias a todos, sois estupendos.
AnónimoHola a todos! Yo también querría compartir con todos lo feliz que me siento desde este fin de semana. No imaginaba lo rápido y profundo que me iba a tocar este curso. Disfrute muchísimo con cada cosa que aprendíamos, compartiéndolo en el grupo que es maravilloso. Gracias enorme a Román y a Rafa por su generosidad y amabilidad compartiendo su sabiduría, a Corina por estar tan atenta a asistir a todos en lo que fuera necesario, a los cuencos!!! Madre mía ya nunca volveré a mirarlos igual… De hecho mi cuenco yo diría que suena distinto ahora! Practico los armónicos cada día porque no pensé que fuera capaz de hacerlos y ahora que me salen no quiero perderlos 😉 Estoy deseando volveros a ver a todos y seguir haciendo magia!!! Un abrazo enorme!
SimonaHola chicos,
ha sido realmente un fin de semana increíble. Aún sigo vibrando, en serio os lo digo. La sensación que me ha quedado es que en los dos días de curso hubo contenida una semana entera. He sentido tantísimo cariño por vuestra parte que, jolín, me habéis emocionado todos. Cuando nos marchamos para Cantabria estaba en un estado tal de paz y alegría, que no me alteré ni media cuando se averió el autobús en mitad de la nada. Fuimos casi tres cuartos de hora por el arcén de la autovía y luego paramos en un hostal de estos que no salen en los mapas, con una explanada bien grande. Y todo lo que se me ocurrió decir es que nos habíamos ido a averiar en un sitio con unas vistas súper bonitas jajaja. Y eso habéis sido vosotros. Los santos a los que suelo mentar en estas ocasiones también os lo agradecen.
Estoy contando los días para que llegue el próximo taller.
Un besuco a todos!! Y un abrazo muy grande!
PatriBuenos Días Romàn… Siento el retraso en escribirte…no he tenido mucho tiempo… tenía pendiente transmitirte por mail mis impresiones del curso y no quiero dejar de hacerlol..
Ante todo, agradecerte la entrega y maestría compartida. Para mí, lo principal y más importante fue que con el sonido… PUDE PONERLE VOZ Y MÚSICA A MI CORAZÓN…. Estaba intentando hacer un trabajo de apertura del corazón, y los armónicos me sirvieron para poder entar en él, escucharle y poder establecer de verdad una comunicaicón desde el alma… cantarle al corazón me ha hecho sentir mucho más cerca de mi misma, me ha hecho poder recogerme en el abrazo dulce que necesitaba… gracias de nuevo…. Sin comentarios con el masaje que todos me hicisteis, por supuesto… eso fue una ascensión para mi y para mi alma… un regalo de vida, … gracias de todo corazón…
Porfa, sigue compartiendo conmigo tus encuentros, cursos y eventos…estoy segura que pronto nos volvemos a encontrar en alguno…..que así sea…. Un beso inmenso, hermano
SoniaHola Rafa y Román,
Con mucho cariño os quiero compartir mi experiencia, puedo deciros que fue tan mágico desde un principio, como un primero amor, lo describo así porque desde el primer momento en que vi la publicidad del curso hasta el final de la formación fue increíblemente maravilloso, no solo aprendí como tocar cuencos o gongs o cantar o realizar terapias… como que me pude auto-sanar y expandir consciencia viviendo la experiencia del curso, y ya en el final fue como para acabar de dar el salto al despertar! Realmente fue un trabajo muy potente nivel, físico, mental y espiritual.Agradezco de corazón vuestro trabajo, sois puro amor, y sois 2 piezas de mi puzzle que no puede faltar… GRACIAS INFINITAS POR ENSEÑARME!Gracias por SER y ESTAR en mi camino! Lo recomiendo 100% a quien quiera probar la terapia y formarse como terapeuta del Sonido.Continuamos vibrando bien alto en la vibración del AMOR.AHOTatianaNo es un domo, es una cápsula espacial.
Comencé la sesión tocando handpan en aquel recogido y precioso domo, mientras esperaba que llegase Román, que generosamente se había ofrecido a darme una sesión de sonido sanador para ayudar en la cura del desbarajuste intestinal que los parásitos me habían causado.
Cuando llegó, me tumbé en el colchón, bien arropado por la mantita (que en las frescas alturas de Gredos se agradece y reconforta).
Su tacto y su canto iniciaron el viaje. Le sentía presente, cuidadoso, cariñoso, humano, cercano. Ahí me pude relajar, respirar y ablandarme hasta caer rendido (rendido, ya no hay nada por lo que luchar, abrimos las murallas de la ciudad, confiamos en que quien llega lo hará para bien).
Me llevaba la respiración a la profundidad, reteniendo al final de la inspiración y de la expiración, sintiendo un campo energético muy potente, pero agradable y tranquilizador.
Disfrutaba muchísimo los momentos de vacío, expulsado todo el aire, creo que podría haber estado horas sin respirar. Pero aparecía uno de sus cantos armónicos y me tiraba del pecho como como un sutil hilo que lo abría, para que el aire entrase de nuevo, con una sensación de plenitud difícil de relatar.
Sentí las aguas de mi vientre removerse, con un sonido a cañería desatascándose; un suspiro.
Dos personas atascadas en la memoria emocional se desvanecieron permitiendo de nuevo el flujo de líquido vital.
Las manos de Román se sintieron firmes y tiernas, inocentes y sabias en mi cabeza. Era un gusto entregar todo mi peso en ellas.
Cuando se separó, mi cuerpo estaba casi fundido en el suelo, pero una sensación de levedad me hacía sentir levitar. Cuanto más me hundía en el suelo, más parecía elevarme sobre él.
Empezaron a sonar los gongs. Diosas y dioses, hadas y duendes, mariposas y jabalíes, ornitorrincos y suricatas, alguien que me explique de dónde sale ese sonido porque no lo entiendo, y me lleva, me lleva muy lejos.
Román desapareció en ese momento. Toda su humanidad tan sentida sólo hace un momento ya no estaba, ni su presencia, ni su cercanía. Sólo había un sonido sobre el que yo empezaba a flotar, hundido en el suelo, flotando en el aire, más allá del aire, allí donde sólo hay unas pocas partículas elementales atravesando los vacíos siderales.
Sí, amigos, no estaba en un domo, estaba en una cápsula espacial, flotando ingrávido, quién sabe en qué rincón de qué galaxia de qué universo…
¿Será que he visto muchas películas de ciencia ficción? ¿Será que escucho demasiados podcasts de astrofísica? ¿Será que alimento sin mesura la imaginación?
Quién sabe.
Lo que sí sé es que allí, flotando conmigo, estaba Guille, que también había entrado en aquella cápsula, y éramos dos objetos flotantes no identificados en mitad del cosmos, delicados como pompas de jabón, lentos como los que ya no tienen que llegar a ningún lugar.
Cuando terminó la sesión yo era una sonrisa con patas, y las patas también eran sonrisa. Pude ver el brillo de mis ojos en la geometría de aquel domo, y en la sonrisa y el brillo de los ojos de Román y de Guillermo.
Me dejaron a solas un rato más en aquel domo, pero no, a mí no me engañan, eso no es un domo, eso es una cápsula espacial…
Creo que este viaje resume bastante bien lo que siento en estos encuentros, y lo que creo que generan Román y la familia de Diafanitos.
A la base está la cercanía, el tacto, el cariño, el cuidado: a la base se respira humanidad. ¡Cuánto me han sanado cada uno de vuestros abrazos, de nuestras risas, de las miradas y conversaciones, de las músicas compartidas!
Luego, desde allí, empiezan a pasar cosas. Sí, cosas, que es la mejor palabra que he encontrado para expresar lo que está fuera del lenguaje. Sé que no es muy poética, pero es que pasan cosas, y luego la poesía se la lleva uno en el cuerpo.
Yo me llevé el corazón lleno de cosas, y los músculos llenos de poesía.
Al día siguiente de la sesión estaba mucho mejor, y bailé como atravesado por un Dios al son de su tambor.
A los dos días estaba subiendo montes para hablar con pinos centenarios, nadando en profundas y gélidas pozas de aguas cristalinas, y trepando montañas escultóricas donde los celtas hicieron sus santuarios y moradas.
Después de dos meses de infierno corporal, de diarreas constantes, de perder 14 kilos, de perder toda energía para funcionar, creo que encontré el cierre, la culminación de un tratamiento con medicinas naturales, antibióticos, y cuidados nutricionales, en esa sesión de sonido sanador.
Mi trote todavía será lento, pero será seguro, hasta que pueda otra vez galopar (y en algún otro salto echar de nuevo a volar…)
Gracias Román, gracias familia.
Anton Pic LorentzQuería simplemente dar las GRACIAS con mayúsculas a Román por la pequeña intervención terapéutica de armónicos que realizó con el grupo de Lourdes y Raúl en el mes de mayo pasado cuando fuimos al residencial de yoga de fin de semana.
Yo le dije que tenía dolor en la rodilla y….he estado genial durante todo el verano y eso que he hecho caminatas variadas…
pensaba darle las gracias personalmente el próximo fin de semana del 26 de octubre, que ellos organizan otro residencial, pero finalmente no puedo ir.
Gracias MIL,
espero que nos veamos la próxima primavera en Diafanum!
Esther Cardador“El canto armónico es una nueva manera de ampliar y tomar conciencia de tu energía a través de la vibración y de la conexión con tu voz interior. Diafanum es un verdadero hogar donde poder conectar con la naturaleza más salvaje y auténtica y con distintas disciplinas que nos ayudan a abrir el corazón y a ser más receptivos y compasivos con nosotros mismos.
El canto armónico nos ayuda a entender la naturaleza desde un lugar no racional ni analítico, nos ayuda a crear redes neurológicas con las que poder entender el nuevo mundo desde otro lugar, a comprender y aceptar que el nuevo mundo no va a venir de ahí fuera, si no de lo que demos a luz cada uno de nosotros.
Por las nuevas y futuras generaciones, por nuestros bosques y nuestra madre naturaleza en todos sus reinos. Que aprendamos a respetar y a convivir con todos los seres en amor, equilibrio, armonía y justicia divina”
Siri Krishna Kaur
Siri Krishna Kaur“Estoy profundamente agradecida por la experiencia que viví e el primer taller de Cantos armónicos al que acudía con Román en primavera de 2022. Fue durante una práctica en parejas, de las primeras que hacíamos, que estaba yo sentada con los ojos cerrados recibiendo los cantos de una compañera cuando de pronto tuve unas ganas irresistibles de llorar. No acudí al taller con ningún dolor o sufrimiento consciente así que lo primero fue sorpresa, pero me dejé llevar. Y a medida que mi compañera seguía cantando de pronto tuve una regresión al momento que era yo bebé.
Me sentí en una cuna sola, muy sola, sin nadie que me acunara o aliviara mi soledad y mi llanto. Y comprendí que por eso estaba llorando en ese momento, era el bebé desamparado.
Y de pronto mi compañera sin saber qué me estaba sucediendo cambió el registro de sus cantos y empezó a entonar como una nana que me fue calmando, restituyendo y sanando.
Yo hasta entonces nunca había sido consciente de haber tenido esa carencia de bebé. Pero claramente estaba en mi subconsciente y salió para ser sanada.
Al terminar la práctica me fundi en un abrazo de agradecimiento a mi compañera, a Román y a la Fuente Universal por esta oportunidad mágica.
Gracias, gracias, gracias.”
Isabel Redondo PitaSoy Nieves Cadalso y quiero compartir una experiencia q sucedió el 3 de marzo 2024, durante el taller “La voz en el cuerpo”, en el curso de una meditación con la voz de Román y el tambor. La meditación era en movimiento espontaneo, al principio surgieron movimientos energéticos, después un intenso color azul y más adelante una imagen, una mujer gritando de dolor en la hoguera, en este punto yo no me identifique con ella, pero al finalizar la meditación tenía la sensación y el dolor en la garganta de una herida abierta y sangrando. Se lo dije a Román y en el momento me canto, aplicandome la terapia, y al ratito el dolor desapareció, en ese tiempo reconocí que era yo. Al terminar el curso mi voz era otra. Yo fui al curso en busca de remedio, me estaba quedando sin voz por mí faringitis crónica. El cambio fue maravilloso.
Gracias Roman
Nieves Cadalso“Desde que descubrí el potencial que tiene la voz en cada uno de nosotros, he sentido la necesidad de ir descubriendo el gran secreto que encierra y cómo nos conecta a través de la vibración. Había hecho algunos talleres con la voz, pero no terminaba de entender bien el canto armónico. Y eso lo he conseguido con Román, en Diafanum (un lugar mágico en medio de la naturaleza), este fin de semana. Por fin he conseguido saber qué son, cómo se forman y lo que hay que hacer para conseguir que salgan. Pero lo mejor de todo es la cualidad que ha dejado, en mí y en mi voz, el trabajo con el canto, el movimiento espontáneo del cuerpo al ritmo de los tambores y de los armónicos, el baño de gong y el chikung Toda una experiencia de conexión con el ser, que te lleva a lo más profundo que hay en uno mismo, de vuelta a casa. Y por si fuera poco, pude comprobar en mí misma el poder sanador de la vibración. Llevaba tiempo con una tendinitis que se me resistía, y este fin de semana se hizo presente. Román con su voz sanadora me envolvió con sus armónicos. ¿Cómo describir la experiencia? Sentí una gran ligereza en el brazo, mucha armonía dentro de mí, conexión y vuelta al centro. Pero lo mejor y más increíble, es que el dolor desapareció. Ha pasado ya una semana y sigo igual de bien. Es cierto que hay momentos en los que el dolor parece que quiere volver, pero entonces recuerdo la experiencia, la emoción que estoy transitando en ese momento, y yo misma me canto, y vuelve a desaparecer. Así que ahora conozco el camino, y sé que depende de mí. Mil gracias Román, por tu generosidad y por compartir con nosotros lo que ya forma parte de ti.
Nuria”
NuriaHe realizado alguna otra formación de canto de armónicos pero no he llegado tan lejos como con las enseñanzas de Román. Su metodología es única, además de ser muy lúdica está enfocada a sacar el mayor potencial de cada persona. Román te ayuda a entrar en los armónicos de la forma que tú necesitas. Román es un alma bellísima que disfruta compartiendo su don. Además si visitas su Espacio Diafanum te hace sentir como en casa. El lugar es maravilloso, una bocanada de naturaleza pura y alta vibración. Recomiendo 100% tanto la formación como la terapia de Román. Y si tienes posibilidad no dejes pasar la oportunidad de ir a Diafanum, volverás renovad@!!!
Vero CostaTe agradezco Román las enseñanzas que recibí con el canto armónico, el cariño que le pones, la creatividad, los ejemplos y metáforas, que me ayudan a recordar más fácilmente tus enseñanzas en mi práctica. Gran maestro para mí y sanador, pues mi rodilla mejoró. Muchas gracias. Hasta pronto. Josefina
Josefina7 de septiembre de 2024
En profundo agradecimiento, Román.
Tras un mes y pico con un intenso dolor en el lado izquierdo del cuello y trapecio, acudí a Román para solicitarle un masaje. Me recibió en su espacio, abrió la camilla, me tumbé en ella, y comenzó la fiesta! Como si estuviese canalizando, de forma natural, comenzó a masajear mi espalda, con manos suaves, fuertes y hábiles fue encontrando el origen del dolor que, para mi sorpresa, yacía en el lado derecho de mi espalda! Con mucha destreza, sintonizando con la sanación, sus intuitivas manos navegaban sobre mi dorso yendo, sin dilación, cual imán, a cada punto donde tenían que ir y, entre algunos “ays! y uyhs!” Que salían de mi boca, fue deshaciendo nudos, me hizo girar el cuerpo y trabajo desde diferentes ángulos, iba sintiendo como se desvanecían los puntos de dolor a medida que sus manos se deslizaban sobre mi piel entre músculos, huesos y tendones, haciendo que mi cuerpo estuviese a cada paso mas relajado.
Una vez finalizada esta parte en el cuerpo físico, relajación, disolución y apertura, Román, que estaba situado justo detrás de mi cabeza, comenzó a cantar armónicos hacia mi corona, wow! Comencé a sentir de inmediato como un flujo de luz-energía comenzaba a recorrer desde donde entraba su voz-vibración en linea recta, deslizándose desde mi cabeza a cuello, columna y al mismo tiempo que iba entrando se expandía, milímetro a milímetro, hacia los lados, permeando cada átomo de cada parte componente de mi cuerpo a su paso, de la cabeza hacia oídos, ojos, cerebro, músculos faciales, boca…el cuello, vertebras, hacia los hombros de ahi se extendió aun mas hacia los brazos codos hasta llegar a cada dedo individualmente pasando por nudillos cartílagos huesos, y así bajando y extendiéndose por la columna y expandiendo hacia cada órgano vital, intestinos, zona pélvica para continuar descendiendo por mis piernas…todas mis células danzando al son de los cantos armónicos emitidos con intención. Y hay más, cuando ya todo lo que me habita y hace que este cuerpo esté vivo estaba en plena efusión comencé a tener maravillosos visuales en luminescencias blancas y azules, estas vibraciones y energías lumínicas estaban trabajando cuales cirujanos astrales sobre mi cuerpo físico y sobre mi campo etérico, qué experiencia!
Pues no solo eso, que al terminar con los armónicos llegaron los encuentros en tercera fase, comenzaron a resonar los Gongs, si ya me encontraba en un estado de apertura y “alta vibración” a través del masaje físico y el masaje vibracional de la voz-canto de armónicos, éstos me sumergieron en un océano sideral de ondas cósmicas que me envolvían, llevaban, traían, ondulaban, acunaban… en una explosión e implosión que se expandía mucho mas allá de mis campos físico y etérico y, en algún momento, me sentí levitar…!
Ya de vuelta, agradecida, regresé a casa con una sensación de paz, calma interior, de alegría inmensa y bienestar impresionantes; ya pasaron unas horas al escribir estas letras y aun siento la vibración sutil en mi cuerpo.
Ha sido un masaje a un nivel superior! Ah! Desapareció el dolor!!
Gracias, Román, qué la Tierra bendiga tus pasos, tus manos, tu voz, y tu corazón, son pura Sanación!
Luna
Luna