Las palabras se quedan cortas para describir este fabuloso encuentro de Fin de Año. Todo un lujo inesperado, la música, los momentos, las emociones. Muchas gracias por todo y un gran abrazo.

Me lo he pasado genial, como si fuera una nube, un ave volando, un tigre corriendo, un pez en el agua, un pino en un bosque, me lo he pasado: ¡Genial!

…Yo, Ángela, doy testimonio que en este lugar reina el amor… Caen las gotas del alma, de pura gratitud, por como sois, por todo el apoyo y esfuerzo, el inmenso cariño con que nos hemos hecho compañeros del camino. Os amo desde lo más profundo de mi ser. ¡Siempre, siempre tenéis vuestro hogar en mi corazón! (…)

Hállese belleza delante de vosotros. Hállese belleza detrás y alrededor…

Gracias, de corazón, por todo vuestro trabajo, entrega y dedicación. La creación de este espacio me inspira y me da valor, fuerza y coraje; para aplicarlo en el día a día en lo cotidiano. Cada piedra cobra vida, respiro con el bosque, me nutro con la tierra, vuelo con el viento ¿Qué más se puede pedir? Tan solo agradecimiento.

Todo el camino que a base de cariño habéis abierto en nuestros corazones. Vuestro legado será honrado como merece: Es tiempo de continuar vuestra labor.

He compartido junto a vosotros y todos vuestros invitados la mejor Noche Vieja de mi vida. Ha sido una noche mágica llena de sorpresas, compañerismo, risas, amor, baile y música. La gente que llega a vosotros son muy especiales y eso me confirma lo maravillosos que sois vosotros. Me he sentido mejor que en casa. Voy a recordar lo vivido aquí durante todo el año, para no olvidar dar gracias a la Pachamama de todo lo que nos provee. Sé que la vida volverá a cruzar nuestros caminos, espero que no sea en mucho tiempo. Os dejo toda la gratitud del mundo. ¡Volveré! ¡Hasta pronto!

Para Román:

Gracias ser hermoso, que con tu ejemplo y tu alegría haces que las ceremonias fluyen con mucho amor y alegría. Bendiciones!!

Mucho mejor que en mis sueños.

Un lugar mágico. Esas prácticas en medio del bosque de castaños – energía y luz.

Amor, amor, amor

Fantástico – excepcional para siempre- Eternidad.

Gracias, gracias miles a todos.

¡Gracias por tanto! “No soy de aquí ni soy de allá, no tengo edad ni porvenir, y ser feliz es mi color de identidad”.

¡Pero qué bien estamos aquí!

Me siento muy agradecida porque el 2014 me dio un regalo de los más bonitos… que ha sido conocer este lugar encantado, lleno de magia y de luz que aporta cada alma que en este lugar habita. ¡Gracias familia!

Volver a Diafanum es volver a mi hogar, a mi sitio de descanso, con mi familia, mi tribu, mi clan…

Gracias a todo el equipo de Diafanum por recordarnos que existe la magia por hacernos sentir como niños en un parque de atracciones, por acompañarnos hacia el centro de la tierra en donde todo puede surgir. Gracias por ser tan auténticos des de la igualdad, y el respeto. Gracias por esta maravillosa experiencia de duendes brujas y tanta magia.. gracias por creer y hacernos entrar en ese estado de amor por el bosque. Sin duda alguna el mejor final de año e inicio del nuevo de toda mi vida y con diferencia desde un lugar tan auténtico, verdadero y sincero que no tengo suficientes palabras para expresar la gratitud que siento en todo mi cuerpo. Simplemente GRACIAS y GRACIAS TAMBIÉN A TODOS LOS ASISTENTES POR COMPARTIR UNA PARTE BRUTAL DE SU ESENCIA si tuviese que definir en tres palabra todo esto sería honestidad, compañerismo y respeto. Otra vez gracias

Queridos amigos!

Quiero daros las gracias, de todo corazón, por haberme acogido estos días en vuestra casa.

He disfrutado mucho de vuestra compañía y de este maravilloso lugar. Así que me voy llena. Gracias por vuestra amabilidad, los ratitos de canto a la luz de las velas, los paseos por el bosque, las siestas en la hamaca, la oportunidad de ayudar y las personas que he conocido aquí.

Gracias por todo.

(Os pido disculpas si en algún momento os he importunado o he sido causa de molestia).

Espero volver más veces, si a vosotros os parece bien.

Hasta otra ocasión.

Alicia.

Pd: Os regalo una poesía que me gusta mucho, es posible que ya la conozcáis:

 

“Nadie fue ayer,

Ni va hoy,

Ni va mañana,

Hacía Dios,

Por este camino,

Que voy yo.

 

Para cada hombre guarda un rayo nuevo de luz el sol

y un camino virgen

Dios.”

Almas

Cuando las almas se reconocen y los cuerpos vibran en el encuentro, y los corazones saltan al ritmo de los tambores, y las voces y cantos se abrazan en el vacío eterno… solo nos queda la gratitud.

Gracias de todo corazón. Abrazos del Alma.

Como poner en palabras lo que no puede ser descrito. La fuerza del “coraçao”, formando una sola voz. Ascender hasta las más altas entidades. Risa, gozo, bienaventuranza, sintiendo bien profunda la medicina. Confío en ti, Gran Espíritu, y me entrego a ti. Dando las gracias a todos los espíritus de estas montañas. Corazón del cielo. Corazón de la tierra. Dando las gracias a mis “irmaos” por abrir su corazón, por sus ojos sonrientes, por este reencuentro más allá del tiempo. Gracias Sto. …, por tanta claridad, por la sanación, por limpiar mi corazón. La ceremonia ha estremecido mi alma. La expansión de nuestra memoria ancestral. Caminito infinito hacia ti, Gran Espíritu. El Amor se ha instalado en mi corazón. Me siento inmensamente feliz. Gracias Madre Tierra.

En el otoño calmado y lluvioso se conjuran los elementos para el encuentro entre almas. De la nada y la quietud surge un canto… Es la tierra, el aire, el agua, el fuego, cristalizados en voces doradas. El bosque se alegra, sonriendo, tintineando entre luces moradas. La magia se despliega en todas sus formas. Encuentros causales… casuales, crisol que se ajusta en la eternidad… riendo, soñando, se sanan las almas. Luz que se despierta al son de la música, besos, risas, cantos en armonía, baños con las hadas del bosque. ¡Cuánta alegría!

… y desde lo profundo del corazón, gracias, gracias, gracias, por el trabajo silencioso que sin hacer nada… todo lo hace.

Tener la oportunidad de estar y trabajar en este espacio tan cuidado que es Diafanum, donde la magia de ver florecer los corazones está a la orden del día, es una verdadera suerte.

Transitamos tiempos en los que es especialmente valioso poder estar en lugares y compañías que nos permiten ser y sanar lo que necesitamos. Diafanum es este lugar, que de la mano de Roman, nos acompaña en procesos de transformación a través del contacto con la Tierra tan cuidada aquí, liberando las memorias que nuestro cuerpo atesora y sacando nuestra voz para descubrirnos y comenzar a Ser aquellos que en un principio fuimos.

El agradecimiento fue, es y será total a Roman por haber creado este lugar y sostenerlo con tanta entrega y tanto amor, a todos los que le acompañan, guían y apoyan en esta encrucijada.

Eva de las Heras Arribas, participante en tantas cosas en este maravilloso templo transparente que sólo puedo decir que hoy soy lo que soy en buena parte gracias a Diafanum, su guardián y sus gentes💠 Gracias